*126:You Can't Do This To Me

Cuando desperté Ross no estaba. Me di una ducha rápida y me vestí.

Bajé, estaba desayunando con los demás en el restaurante del hotel.

Rydel:Buenos días, ___.

Tu:Buenos días.-le sonreí levemente.

Me senté al lado de Ross, esperando que ya no estuviera molesto pero enseguida se levantó.

Ross:He terminado.-sin decir nada más se fue.

Recibí un mensaje justo después.

«Vaya, vaya. Con qué problemas en el paraíso. Ross no es tan comprensivo, o si? Tranquila, acabará entendiendo que tiene que alejarse y podremos estar juntos».

Sentí un escalofrío. Después de lo de anoche tenía mucho miedo.

Riker:Vaya. Ha pasado algo?-comentó al ver a Ross alejarse.

Tu:Yo... No te preocupes. 

Rocky:Tienes razón. Yo ya no me preocupo. Están igual que siempre. Esta noche estaré oyendo su reconciliación desde mi cuarto otra vez.-me sonrojé notablemente al entender el doble sentido de lo que decía. Por Dios! Era necesario ese comentario!?

Después de desayunar subí de nuevo al cuarto. Ross estaba terminado de prepararse. Tenían una entrevista y una firma de discos antes del concierto así que se irían pronto.

Tu:Ross... Podemos hablar?

No me hizo ni caso. Me estaba haciendo la ley del hielo.

Tu:Ross, por favor.

Nada. Seguía a lo suyo.

Me harté. Iba a entrar al cuarto de baño pero me puse frente a él.

Tu:Deja de ignorarme. Trató de hablar contigo.

Ross:Que?-dijo fríamente.

Tu:Yo... Lo siento. No me gusta que discutamos. Solo... Podemos olvidar lo de ayer? Te prometo que estoy bien. No me pasa nada. Solo olvidémoslo, por favor-sentía mis ojos llenarse de lágrimas.

Ross:Estas saliendo con otro?-dijo sin expresión en su rostro-Es eso? Por eso los mensajes? Por eso tardaste tanto? Por qué si me estás engañando prefiero que me dejes ya.

Tu:Que?!-abrí los ojos como platos, no podía estar creyendo eso-No! Jamás! Ross, te amo.

Ross:Entonces que está pasando? Porque no se me ocurre otra explicación.

Tu:Yo... No puedo, Ross.

Aparté la vista. No soportaba que me mirara como si le hubiese hecho algo imperdonable.

Ross:Como quieras-me dio la espalda y siguió a lo suyo.

Narra Ross:

Me dolía que ___ me estuviera ocultando cosas. Se suponía que la confianza era lo más importante. Me decía que confiara en ella. Pero ella no era capaz de confiar en mí como para contármelo. 

Ross:Saldrás a recorrer Berlín?-le pregunté fríamente.

Tu:No lo creo-su voz sonaba apagada.-Yo... Prefiero componer un rato.

Ahora sí que estaba rara. No desaprovecharía la oportunidad de perderse en las calles de cualquier ciudad desconocida y recorrer lo máximo que pudiese. Quizás fuera porque se sentía mal después de nuestra discusión pero... Aún así estaba rara.

Ross:Como digas.-le dije aún molesto.

Narras tu:

Ross salió y me quedé completamente sola. Quería que lo entendiera. Que supiera que tan sólo trataba de no lastimarlo. Pero... Quizás al no contárselo lo estaba lastimando aún más? Si fuera al revés habría querido saberlo. Probablemente hubiera reaccionado igual o peor que él. Tenía que acabar con todo esto. Tenía que parar a Blake. No podía tener miedo toda mi vida de salir a la calle, no podía mentirle a Ross eternamente. No podía dejar que controlase mi vida. Era mi vida y yo tomaba las decisiones. No él. 

En un acopio de valor le mandé un mensaje a Blake y le dije que lo vería en el parque de en frente. 

Al instante de haber mandado el mensaje me arrepentí. Que se suponía que iba a hacer para pararlo? Como iba a enfrentarme a él? Era físicamente más fuerte que yo, la fuerza bruta no era una opción. Pero además era psicológicamente inestable así que no había forma de razonar con él. Definitivamente no tenía opciones. Pero ya estaba hecho. Y quizás... Con muchísima suerte, llegáramos aún acuerdo. 

Bajé por las escaleras, a la menor velocidad posible pero aún así llegué demasiado pronto a abajo. Nunca debí mandar ese mensaje. Pero... Estábamos en pleno día. No podía hacerme nada. Habría mucha gente. Traté de repetirme eso hasta que llegué al parque. Era el único consuelo que me quedaba. 

Quizás lo mejor, y más inteligente por mi parte, habría sido simplemente olvidarme del tema y quedarme en el hotel. Hacer como si no lo hubiese mandado. No arriesgarme. Pero una parte de mí me decía que bajara esas escaleras, cruzara la calle y terminara con todo eso de una vez.

Nada más llegar al parque palidecí. Estaba vacío. Era más o menos la hora de comer así que probablemente todo el mundo estaba en su casa o volviendo a ella. No en el parque tomando el aire. Pensé en marcharme pero era tarde. Blake ya me había visto.

Blake:Por fin te has decidido-sonrió de forma retorcida, como el chiflado que era.

Narra Ross:

Olvidé mi mochila así que tuve que volver al hotel a una velocidad increíble para tratar de volver a tiempo para la entrevista. Entré en la habitación pero ___ no estaba. Probablemente habría decidido salir y conocer Alemania. 

Cogí mi mochila e iba a salir cuando noté que en la mesa estaba su teléfono. Se lo había olvidado.

Sabía que estaba mal, que era bastante inmoral por mi parte y todo eso pero lo cogí. Tenía que saberlo. Tenía que saber si esa idea estúpida en mi cabeza no era tan estúpida. Tenía que saber si me estaba engañando.

Vacile un poco pero terminé por encenderlo y buscar sus mensajes. Tenía un montón del mismo número y hablaba de estar poder estar  juntos y un montón de ñoñerías más. Sentí como me hervía la sangre y más aún al final. El último mensaje que había era uno suyo. De ___. Le decía a ese tipo que se encontraran en el parque. Había sido hacía unos diez minutos.

Rápidamente bajé y crucé la calle. Estaba tan furioso que creo que me pasé el semáforo en rojo. 

No podía creer que me estuviera haciendo esto. ___ no. Ella... No podía hacerme algo así.